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Maestra de Educación Primaria e Infantil.

lunes, 16 de junio de 2014

DUDAS COMUNES DE CARA A UNA OPOSICIÓN DE MAESTROS

¿Cuándo debería empezar a preparar las oposiciones a maestros?

Lo aspirantes noveles al cuerpo de maestro suelen hacerse estas preguntas: Quiero empezar a prepararme cuanto antes, ¿Es rentable empezar tan pronto?; para tener éxito ¿Cuál sería el periodo óptimo de preparación?; ¿Academia, preparador o auto-preparación?

Es difícil establecer un tiempo óptimo para preparar las oposiciones a maestros ya que influyen muchos factores que difieren de una persona a otra: experiencia y conocimientos previos, tiempo disponible, facilidad y actitud ante el estudio, disciplina, etc.

Habitualmente los opositores se preparan las oposiciones de maestro durante un año, lo que no quiere decir que sea suficiente, al contrario, según mi experiencia mucha gente va muy mal preparada a las oposiciones, confiando en exceso en su suerte o en su experiencia y luego se sienten muy decepcionados cuando no obtienen los resultados esperados.

Hay que tener siempre presente que a las oposiciones no se va a aprobar sino que se trata de conseguir estar entre los mejores aunque se tengan pocas posibilidades de conseguir plaza porque incluso para entrar en bolsa y tener oportunidades de trabajar no es lo mismo estar entre los primeros puestos que tener miles de interinos por delante.

Es muy difícil prepararse intensamente cuando no se tiene seguro una fecha de convocatoria aproximada. Debemos encontrar un punto intermedio entre prepararse a fondo en un año o ser bastante exigente y empezar a dos o más años antes.

Entonces, ¿Qué hago si no sé seguro cuando serán las próximas oposiciones de maestros?

Las oposiciones siempre son una carrera de fondo. El que verdaderamente se lo propone al final lo consigue, pero hace falta constancia y una buena preparación. Confiar en la suerte ahora no es muy buena opción, sólo funciona cuando hay una gran oferta de plazas, situación que no se da en la actualidad.

Lo mejor es empezar a preparar la programación e ir haciendo una lectura y actualización de los temas. No obligándose a memorizar pero sí conociendo el contenido de los temas, descubriendo las relaciones que existen entre ellos, identificando el contenido que se repite en diferentes temas y que por tanto es más útil conocer y controlar, actualizando e identificando cuál es la normativa que se necesita para los temas y para resolver los supuestos prácticos, etc.

A la vez ir elaborando una programación (paso a paso). Tanto si tienes experiencia como si no, la primera programación que hagas será muy mejorable, bien porque encontrarás propuestas y actividades más interesantes, innovadoras, originales, o bien porque podrás elaborar material didáctico de apoyo que podrá servirte de ayuda en tu exposición de la unidad didáctica. Además de que cuanto más trabajada tengas la programación mejor será su defensa, sin duda. Y más posibilidades tendrás de "enamorar al tribunal". Aspecto fundamental para destacar en las oposiciones de maestros.

Si lo haces así el segundo año la programación ya te quitará menos tiempo de estudio y también te será más fácil aprenderte los temas porque a medidas que los leías, actualizabas, consultabas para elaborar la programación, etc., habrás ido aprendiendo bastante de su contenido.

¿Academia, preparador o auto-preparación en las oposiciones a maestros?

En cuanto a si elegir una academia, un preparador o probar a prepararte solo, es un tema que se preguntan muchos aspirantes a maestros.
Es difícil aconsejar en este tema, ya que las necesidades de cada uno son diferentes, hay quien necesita que alguien les marque el ritmo y “les obligue” en cierta medida y por eso se apuntan en una academia y quien es más autónomo en su trabajo y no necesita esa presión externa.
Otro aspecto a valorar es la experiencia a la hora de elaborar la programación, en mi opinión es en la preparación de la programación y los supuestos prácticos donde más ayuda necesitan los docentes noveles. En ese caso lo que conviene asegurarse es que el preparador particular o profesor de academia vaya a realizar ese trabajo de supervisión y tutoría personalizada que se necesita.
En el caso de los docentes con experiencia la situación es diferente, tienen recursos propios abundante para programar y para resolver los supuestos prácticos pero suelen encontrar dificultad en ponerse a estudiar los temas (falta de hábito, falta de tiempo, obligaciones familiares, etc.) y necesitan en ocasiones ayuda para organizar sus conocimientos de forma adecuada para las pruebas para las que se presentan.

En mi opinión en el temario no se necesita demasiada ayuda, cualquier docente debe ser capaz de prepararse el temario por su cuenta, conseguir uno no es nada complicado. De hecho los que no hace mucho que acabaron la carrera ya conocen gran parte de los contenidos porque son también los que se trabajan en la universidad.

Si te decides a buscar un preparador o una academia asegúrate de que puede ofrecerte la ayuda que tú necesitas.

Valora estos aspectos detenidamente y no dejes impresionar por las afirmaciones de tipo publicitario del tipo “99% de aprobados”, en realidad nadie puede garantizar estos resultados. Lo mejor es que tú identifiques tus necesidades y busques la oferta que mejor responda a lo que necesitas.

jueves, 2 de enero de 2014

COMPRENSIÓN LECTORA

La comprensión lectora es la capacidad para entender lo que se lee, tanto en referencia al significado de las palabras que forman un texto, como con respecto a la comprensión global del texto mismo.

Estudios como el informe PISA o el PIRLS concluyen que en los últimos años los estudiantes europeos, y especialmente los españoles (en torno a un 26%), tienen cada vez más problemas con la comprensión lectora. 

Así, cada vez son más los alumnos a los que les resulta difícil sacar información de lo que leen, interpretarla y reflexionar sobre ella.

La comprensión lectora mejora con la práctica. No obstante, tanto padres como educadores deben tener presente que la lectura ha de ser un placer, no una obligación. Desde luego, lo ideal sería fomentar el hábito de la lectura desde pequeños en casa, con cuentos o adivinanzas, y animarles a leer ellos solos progresivamente.

Hay que evitar los momentos en los que el niño se encuentre cansado, hambriento o realizando cualquier actividad lúdica, y escoger lecturas adecuadas e interesantes, según edad, gustos y capacidades, para evitar que el hecho de leer se convierta en un fastidio.

El objetivo es que muestre cada vez mayor interés y que se esfuerce en comprender lo que lee, por ello el contenido ha de estar acorde con sus conocimientos, con un vocabulario adecuado y sin formas gramaticales o construcciones sintácticas que le resulten frustrantes. En el caso de los jóvenes, siempre ayuda tener a mano un diccionario para resolver dudas y apuntar el significado de aquellas palabras que no entiendan. 

Cualquier momento cotidiano es bueno para motivar al niño, como leer carteles mientras se pasea por la calle o pedirle que nos cuente qué ha estado leyendo en clase ese día. Tampoco hace falta leer solo libros, ya que tebeos, revistas o artículos de periódicos acordes a su edad son otra buena opción.

Actividades para fomentar la compresión lectora del niño:

  1. Una de las actividades más apropiadas para que los niños inicien el proceso de trabajar la compresión lectora es proporcionar una frase en desorden, en donde los niños deben ordenarla para que así la misma proporcione un significado. Un ejemplo es niño el agua toma, la forma como el niño debe organizar la frase es el niño toma agua.
  2. Otra actividad importante para fomentar la compresión en la lectura es proporcionar un texto corto, en donde se proporcionen algunos datos sobre una historia, después se le deben proporcionar varias imágenes en donde el niño relacione la que tiene que ver con el texto.
  3. También para que los niños aprendan a ubicar lo leído y por ende crear una imagen mental, se les puede proporcionar varias imágenes y después se debe seleccionar una en específico, de acuerdo a algunos datos proporcionados.
  4. Siguiendo con el proceso de comprensión lectora en los niños, se les puede proporcionar una frase corta como: mi mamá toma leche, a esta el niño debe añadir nuevas elementos, lo que daría como resultado, mi mamá toma leche en la casa de la abuela.
  5. El proporcionar cada día una lectura diferente es importante para que el niño pueda comprender diferentes tipos de lectura, después de haber leído es importante hablar con el niño para que él le cuente que leyó, no en forma de examen, sino como cuando alguien cuenta una historia que le sucedió.
  6. Para tener una buena compresión lectora, es importante que los niños relacionen lo leído con una historia de su mundo, esto quiere decir que después de haber leído una historia puedan decir al personaje le paso lo mismo que a mi tía, de esta forma se sabrá que de seguro se comprendió lo leído.
  7. Otra alternativa para que los niños se relacionen con la lectura y la puedan comprender, es realizar una receta con los mismos, de manera que ellos la lean y después comiencen a ponerla en práctica, teniendo en cuenta cada uno de los elementos proporcionados.
  8. Para que los niños creen imágenes mentales sobre una historia es apropiado proporcionarles varias imágenes en donde ellos sean los que generen la historia a partir de dichas imágenes, no tiene que ser muchas imágenes, pueden se pocas.

A continuación os aporto algunas de las páginas donde podréis encontrar fichas para trabajar la comprensión lectora con vuestros hijos y alumnos de infantil y primaria:


Referencias:

sábado, 31 de agosto de 2013

ENTREVISTA A NAZARET CASARRUBIOS MENDOZA

Nazaret Casarrubios Mendoza, 24 años, diplomada en magisterio de Educación Primaria e Infantil, nos cuenta su decisión de querer ser maestra y cómo la crisis repercute al sector del cuerpo de maestros en Castilla La Mancha.

1.    ¿Por qué elegiste ser maestra?
Por vocación y porque siempre me han gustado mucho los niños/as, no solo les enseñas sino también aprendes mucho de ellos.
Me encanta ayudarlos en su crecimiento tanto físico como intelectualmente para que sean unas personas sociables y sepan desenvolverse en el medio que les rodea.
Considero que esta es una de las profesiones más gratificantes ya que los niños siempre te contagian sus ilusiones, sus risas, sus sueños, es como si volvieses a ser un niño de nuevo.

2.    ¿Cuáles son tus cualidades para ser maestra?
Tengo una cualidad que considero importantísima para trabajar con los niños y es la paciencia. Sé que la poseo porqué veo a amigos y familiares que cuando están con niños/as no aguantan nada y cuando me ven a mí, me preguntan que porqué no me pongo nerviosa y es que con los niños tienes que ser muy paciente. También soy una persona tranquila (aunque tengo mis momentos de nervios) y muy cariñosa. Me gusta tener un trato cercano con los niños/as y también conocer sus inquietudes y preocupaciones.

3.    Si no fueras maestra, ¿Qué serías?
Me hubiese gustado estudiar Psicología pero aplicada a la infancia, es decir, también trabajaría con niños/as.

4.    ¿Escuela pública o privada? ¿Por qué?
Lo primero que tengo que decir antes de decidirme por una u otra, es que depende mucho del tipo de colegio, maestros/as, sistema educativo, etc.
Pero yo elijo la escuela pública ya que es de todos, todos los niños/as son aceptados sin hacer ningún tipo de selección, ni de diferencias. Los maestros/as se eligen por oposición. En la escuela pública se intenta promover la solidaridad, la educación intercultural, la formación integral en derechos humanos y ciudadanía. La educación pública nos iguala, nos enseña que todos tenemos los mismos derechos.
En resumidas cuentas hay muchas diferencias entre una y otra, también hay que tener en cuenta también el tipo de colegio, los maestros/as, el sistema educativo que tienen, etc.

5.    ¿Cómo sería tu escuela ideal?
Pues sería una escuela en la cual el maestro fuese un alumno más, no habría libros, los niños crearían los materiales.
Las infraestructuras no tendrían ningunas barreras, se ensañarían más valores y se fomentaría la creatividad.
Se enseñaría a los alumnos/as a ser mejores personas, habría menos niños/as por aula para que tuviesen un trato más individualizado, mejores actitudes de atención, escucha y seguimiento.

6.    ¿Cuál crees que es nivel educativo de la Comunidad de Castilla La Mancha?
Nuestra comunidad necesita mejorar mucho en Educación, ya que creo que tenemos un nivel medio-bajo, en estos últimos años ha empeorada debido a la crisis.

7.    ¿Consideras que hay una relación entre crisis y fracaso escolar?
Por supuesto que sí, muchos factores influyen en la educación de los niños/as y los factores socioeconómicos son uno de ellos.
Los últimos cambios y recortes en la enseñanza pública afectan a la disminución de la plantilla docente y esto por supuesto repercutirá sobre la calidad pedagógica.
Se tienen que trabajar más horas y ha subido la ratio, es decir, más alumnos en las aulas, lo que supone que estos alumnos ya no van a tener una adecuada atención individual y menos aún si hay algún alumno con necesidades específicas de apoyo educativo por no hablar que desaparecen las becas.

8.    ¿Qué medidas tomarías para atajar el fracaso escolar?
Hay muchas medidas que se pueden poner en práctica para atajar este problema como por ejemplo hacer actividades de recuperación y actividades extraescolares motivadoras, que los aprendizajes sean significativos y relevantes, orientar a los niños/as, un interés por parte de los maestros y padres por los problemas del alumno, realizar estudios psico-pedagógicos, etc.
Otra medida que considero muy importante es la atención a la diversidad.

9.    Te has presentado por primera vez a las oposiciones de CLM, ¿Qué conclusión obtienes del proceso selectivo realizado para la incorporación al cuerpo público de maestros?
Si ha sido el primer año y la verdad ha sido año de duro trabajo, muchas horas de estudio que finalmente considero que me han servido para bien poco. Respecto al proceso selectivo me parece totalmente subjetivo,  considero que ser un buen maestro no se mide con estudiarte de “memorieta” 25 temas, deberían medir mas aspectos.
Desde mi punto de vista hay que cambiar muchos aspectos para mejorar el proceso selectivo, lo primero debería ser más objetivo y mas equitativo respecto a todos.

10. Has estado en activo recientemente en una escuela de verano, ¿Has notado la crisis en algunos aspectos escolares, como por ejemplo recursos y materiales? ¿Qué evidencias conoces personalmente o de tu entorno en las que se note claramente la incidencia de la crisis en la educación?
Si estuve trabajando el mes de Julio en una escuela de verano y en comparación con otro año (en el 2009) que también tuve la suerte de trabajar en la misma escuela he notado una gran diferencia. La primera que en 2009 el Ayuntamiento tenía subvención para la escuela y este año no.
Y por supuesto esto se ha notado en los materiales que disponíamos que eran básicos además de ser materiales de otros años, muchos niños se quejaban debido a qué no teníamos suficientes tijeras o pegamentos. Esto supone que muchas actividades no las puedes realizar porqué el material es caro.


Nazaret, compañera de universidad y, sin embargo, amiga, termina la entrevista con esta frase: Dime y lo olvido, enséñame y lo recuerdo, involúcrame y lo aprendo. (Benjamin Franklin).

miércoles, 28 de agosto de 2013

DESARROLLO DEL NIÑO 6-12 AÑOS

El período de desarrollo que va de los seis a los doce años, tiene como experiencia central el ingreso al colegio. 
Su éxito o fracaso en este período va a depender en parte de las habilidades que haya desarrollado en sus seis años de vida anteriores. Este hecho marca el inicio del contacto del niño con la sociedad a la que pertenece, la cual hace exigencias que requieren de nuevas habilidades y destrezas para su superación exitosa, y es, a través del colegio, que se le van a entregar las herramientas necesarias para desenvolverse en el mundo adulto.

El colegio puede ser una prueba severa de si se han logrado o no las tareas del desarrollo de las etapas anteriores, ya que el período escolar trae a la superficie problemas que son el resultado de dificultades previas no resueltas.

La entrada al colegio implica que el niño debe enfrentar y adecuarse a un ambiente nuevo en el cual deberá lidiar con demandas desconocidas hasta ese momento para él, aprender las expectativas del colegio y de sus profesores y lograr la aceptación de su grupo de pares. La adaptación que el niño logre a este nuevo ambiente tiene una importancia que trasciende lo inmediato. El grado en que el niño se considera incluido en el colegio es expresión del éxito en su adaptación. Reacciones como ansiedad, evitación o actitudes negativas pueden ser signo tempranos de dificultades en su ajuste y que pueden tornarse en problemas futuros.

Por otro lado, la relación con los padres cambia, iniciándose un proceso gradual de independencia y autonomía, y aparece el grupo de pares como un referente importante y que se va a constituir en uno de los ejes centrales del desarrollo del niño en esta etapa.

El desarrollo del niño lo podemos separar por áreas; sin embargo existe una estrecha relación entre los aspectos intelectual, afectivo, social y motor. Lo que vaya ocurriendo en un área va a influir directamente el desarrollo en las otras, ya sea facilitándolo o frenándolo o incluso anulándolo, y provocando el regreso del niño a conductas o actitudes ya superadas.

ÁREA MOTORA


El relación al crecimiento físico, entre los 6 y 12 años, comienza a disminuir su rapidez. En términos generales, la altura del niño en este período aumentará en 5 o 6% por año, y el peso se incrementará en aproximadamente un 10% por año. Los niños pierden sus dientes de leche y comienzan a aparecer los dientes definitivos. Muchas niñas comienzan a desarrollar entre los 9 y 10 años las características sexuales secundarias, aún cuando no están en la adolescencia.

Por otro lado, los niños de esta edad se vuelven más fuertes, más rápidos, hay un continuo perfeccionamiento de su coordinación: muestran placer en ejercitar su cuerpo, en probar y aprender nuevas destrezas. Su motricidad, fina y gruesa, en esta edad muestra todas las habilidades posibles, aún cuando algunas de ellas aún sean ejecutadas con torpeza.

ÁREA COGNITIVA

En el ámbito cognitivo, el niño de seis años entra en la etapa que Piaget ha denominado OPERACIONES CONCRETAS. Esto significa que es capaz de utilizar el pensamiento para resolver problemas, puede usar la representación mental del hecho y no requiere operar sobre la realidad para resolverlo. Sin embargo las operaciones concretas están estructuradas y organizadas en función de fenómenos concretos, sucesos que suelen darse en el presente inmediato; no se puede operar sobre enunciados verbales que no tengan su correlato en la realidad. La consideración de la potencialidad (la manera que los sucesos podrían darse) o la referencia a sucesos o situaciones futuros, son destrezas que el individuo logrará al llegar a la adolescencia, al tiempo de llegar a las operaciones formales.

Uno de los principales hitos del desarrollo intelectual mencionado en la Teoría de Piaget, es que el niño alcanza en este período del desarrollo, la noción de CONSERVACIÓN, es decir, es la toma de conciencia de que dos estímulos, que son iguales en longitud, peso o cantidad, permanecen iguales ante la alteración perceptual, siempre y cuando no se haya agregado ni quitado nada.

Existen varios principios que van a caracterizar la forma en que los niños de esta edad piensan:
  • IDENTIDAD: Es la capacidad de darse cuenta de que un objeto sigue siendo el mismo aún cuando tenga otra forma.
  • REVERSIBILIDAD: Es la capacidad permanente de regresar al punto de partida de la operación. Puede realizarse la operación inversa y restablecerse la identidad .
  • DESCENTRADO: Puede concentrarse en más de una dimensión importante. Esto se relaciona con una disminución del egocentrismo. Hasta los seis años el niño tiene un pensamiento egocéntrico, es decir, no considera la posibilidad de que exista un punto de vista diferente al de él. En el período escolar va a ser capaz de comprender que otras personas pueden ver la realidad de forma diferente a él. Esto se relaciona con una mayor movilidad cognitiva, con mayor reflexión y aplicación de principios lógicos.

En términos generales el niño en esta edad va a lograr realizar las siguientes operaciones intelectuales:
  • clasificar objetos en categorías (color, forma, etc.), cada vez más abstractas.
  • ordenar series de acuerdo a una dimensión particular (longitud, peso, etc.)
  • trabajar con números
  • comprender los conceptos de tiempo y espacio
  • distinguir entre la realidad y la fantasía

Por otro lado, hay un perfeccionamiento de la memoria, tanto por que aumenta la capacidad de ella, como porque mejora la calidad del almacenamiento y la organización del material. Se enriquece el vocabulario, hay un desarrollo de la atención y la persistencia de ella, en la tarea. El lenguaje se vuelve más socializado y reemplaza a la acción.

ÁREA EMOCIONAL Y AFECTIVA

La etapa escolar, se caracteriza en lo afectivo, por ser un periodo de cierta calma. La mayor parte de la energía del niño está volcada hacia el mejoramiento de si mismo y a la conquista del mundo. Hay una búsqueda constante de nuevos conocimientos y destrezas que le permitan moverse en el futuro en el mundo de los adultos.

De acuerdo a la teoría de Erikson la crisis de esta etapa es Industria v/s Inferioridad, e implica el logro del sentimiento de la Competencia. El tema central es el dominio de las tareas que se enfrentan, el esfuerzo debe estar dirigido hacia la productividad y, por lo tanto, se debe clarificar si se puede realizar este tipo de trabajo. El niño debe desarrollar sus cualidades corporales, musculares y perceptivas, debe alcanzar progresivamente un mayor conocimiento del mundo al que pertenece y en la medida en que aprende a manejar los instrumentos y símbolos de su cultura, va desplegando el sentimiento de competencia y reforzando su idea de ser capaz de enfrentar y resolver los problemas que se le presentan. El mayor riesgo en esta etapa es que el niño se perciba como incapaz o que experimente el fracaso en forma sistemática, ya que esto va dando lugar a la aparición de sentimientos de inferioridad, los cuales van consolidándose como eje central de su personalidad. Los hitos centrales de esta etapa, son el desarrollo del autoconcepto y la autoestima del niño.

AUTOCONCEPTO

Es el sentido de sí mismo. Se basa en el conocimiento de lo que hemos sido y lo que hemos hecho y tiene por objetivo guiarnos a decidir lo que seremos y haremos. El conocimiento de sí mismo se inicia en la infancia en la medida en que el niño se va dando cuenta de que es una persona diferente de los otros y con la capacidad de reflexionar sobre sí mismo y sus acciones. A los 6-7 años comienza a desarrollarse los conceptos del: yo verdadero, quien soy yo ideal, quien me gustaría ser, estructura que incluye los debe y los debería, los cuales van a ayudarlo a controlar sus impulsos. Esta estructura va integrando las exigencias y expectativas sociales, valores y patrones de conducta. Estas dos estructuras en la medida en que se van integrando, deben ir favoreciendo el control interno de la conducta del niño.

AUTOESTIMA

Esta es la imagen y el valor que se da el niño a sí mismo. Es una dimensión afectiva y se construye a través de la comparación de la percepción de sí mismo y del yo ideal, juzgando en que medida se es capaz de alcanzar los estándares y expectativas sociales.
La autoestima se basa en:
  • Significación: que es el grado en que el niño siente que es amado y aceptado por aquéllos que son importantes para él.
  • Competencia: es la capacidad para desempeñar tareas que consideramos importantes.
  • Virtud: consecución de los niveles morales y éticos.
  • Poder: grado en que el niño influir en su vida y en la de los demás.
La opinión que el niño escuche acerca de sí mismo, a los demás va a tener una enorme trascendencia en la construcción que él haga de su propia imagen. La autoestima tiene un enorme impacto en el desarrollo de la personalidad del niño. Una imagen positiva puede ser la clave del éxito y la felicidad durante la vida.

ÁREA SOCIAL

La etapa escolar también está marcada en el área social por un cambio importante. En este período existe un gran aumento de las relaciones interpersonales del niño; los grupos de amistad se caracterizan por ser del mismo sexo. Entre los escolares pequeños (6 y 7 años), hay mayor énfasis en la cooperación mutua, lo que implica dar y tomar, pero que todavía está al servicio de intereses propios (nos hacemos favores). En los escolares mayores (8 a 10 años), la amistad se caracteriza por relaciones más intimas, mutuamente compartidas, en las que hay una relación de compromiso, y que en ocasiones se vuelven posesivas y demandan exclusividad.

El grupo de pares, en los escolares, comienza a tener una centralidad cada vez mayor para el niño, ya que es en la interacción con ellos donde descubren sus aptitudes y es con ellos con quienes va a medir sus cualidades y su valor como persona, lo que va a permitir el desarrollo de su autoconcepto y de su autoestima. Las opiniones de sus compañeros acerca de sí mismo, por primera vez en la vida del niño, van a tener peso en su imagen personal.

El intercambio con los compañeros permite al niño poder confrontar sus opiniones, sentimientos y actitudes, ayudándole a examinar críticamente los valores que ha aceptado previamente como incuestionables de sus padres, y así ir decidiendo cuáles conservará y cuales descartará. Por otro lado, este mayor contacto con otros niños les da la oportunidad de aprender cómo ajustar sus necesidades y deseos a los de otras personas, cuándo ceder y cuándo permanecer firme.

El aspecto negativo en este ámbito es que los niños de esta edad son muy susceptibles a las presiones para actuar de acuerdo con los pares. Esto principalmente afecta a los niños de baja autoestima y habilidades sociales poco desarrolladas. En términos generales, la relación con los pares, contrapesa la influencia de los padres, abriendo nuevas perspectivas y liberando a los niños para que puedan hacer juicios independientes.

Existe consenso en que el logro de relaciones positivas con pares y la aceptación por parte de ellos, no son sólo importantes socialmente para los niños sino también dan un pronóstico acerca de su ajuste social y escolar posterior. El aislamiento social, durante el periodo escolar es un indicador importante de desajuste o trastorno emocional.

Con respecto a los padres, el niño va aumentando su nivel de independencia y distancia, como consecuencia de su madurez física, cognitiva y afectiva. El tiempo destinado por los padres a cuidar la los niños entre 6 y 12 años es menos de la mitad de lo que ocupan cuando son preescolares. Sin embargo, los padres siguen siendo figuras muy importantes; los niños se dirigen a ellos en busca de afecto, guía, vínculos confiables y duraderos, afirmación de su competencia y valor como personas

Progresivamente, se va tendiendo a una corregulación de la conducta del niño, entre él y sus padres. Éstos realizan una supervisión general en el control, y el hijo realiza un control constante. La eficiencia de esta regulación está determinada por la claridad de la comunicación entre padres e hijos, las reglas claras, sistemáticas y consistentes.

Los profesores comienzan en este período a tener una mayor importancia, se convierten en sustitutos de los padres en el colegio; sin embargo el valor que le asignen al niño va a estar dado por la demostración de sus capacidades. Los profesores imparten valores y transmiten las expectativas sociales al niño y a través de su actitud hacia él colabora en el desarrollo de su autoestima.
Se ha demostrado que aquellos profesores que muestran confianza en la capacidad del niño, incentivan el trabajo y el desarrollo de potencialidades en el niño, a la vez que favorecen un autoconcepto y una autoestima positivos.

Otro elemento del área social es el juego. El rol del juego es dar oportunidades de aprendizaje. En él, el niño puede ir ganando confianza en su habilidad para hacer una variedad de cosas, entra en contacto con el grupo de pares y se relaciona con ellos, aprendiendo a aceptar y respetar normas. El juego ofrece modos socialmente aceptables de competir, botar energía reprimida y actuar en forma agresiva. Durante este período, hay dos tipos de juegos que predominan:
  1. juego de roles: (6-7 años) tiene un argumento que representa una situación de la vida real. Se caracteriza por ser colectivo, tener una secuencia ordenada y una duración temporal mayor. Hay una coordinación de puntos de vista, lo que implica una cooperación. El simbolismo aquí se transforma en colectivo y luego en socializado, es una transición entre el juego simbólico y el de reglas.
  2. juego de reglas: (8-11 años) implica respeto a la cooperación social y a las normas, existiendo sanción cuando ellas se transgreden. Este juego es el que va a persistir en la adultez.

ÁREA MORAL Y SEXUAL

En esta etapa comienza la aparición de la moral vinculada a la consideración del bienestar del otro, lo que puede ocurrir debido al desarrollo cognitivo que se produce en esta edad y que permite que el niño considere puntos de vista diferentes a los suyos, producto de la disminución del egocentrismo de etapas anteriores. Esto implica que el niño puede imaginar como piensa y siente otra persona.
Moral de Cooperación o Autónoma: Se caracteriza por cierta flexibilidad, por la capacidad de darse cuenta de los diferentes puntos de vista. Logra hacer juicios más sutiles que incluyen las intenciones del que cometió la falta y no tan sólo las consecuencias del hecho. Los juicios de niños menores solamente consideran el grado de la falta.
Respecto al ámbito sexual: hace algunas décadas se consideraba que esta etapa se caracterizaba por la ausencia absoluta de interés sexual; sin embargo en la actualidad se ha constatado que se mantiene cierto interés por parte de los niños, tanto en preguntar y hablar acerca del tema como por experimentar y participar en juegos sexuales, pero la intensidad y el tiempo destinados a ellos son notoriamente menores que en la etapa anterior y a los que se va a destinar durante la adolescencia. Esto ocurre debido a que el foco central del niño durante la niñez intermedia está puesto en el aprendizaje y adquisición de herramientas que le permitan integrarse al mundo adulto.

CONCLUSIONES

Podríamos resumir esta etapa de acuerdo a las tareas que el niño debe lograr:
  • Iniciar un proceso gradual de autonomía e independencia de los padres, que le permita integrarse a nuevos ambientes.
  • Integrarse a su grupo de pares, lo cual se ve reflejado en su participación en juegos colectivos, su capacidad de establecer vínculos con otros niños y su percepción de ser aceptado por ellos.
  • Desarrollo de sentimientos de competencia y capacidad, realistas, es decir que incluyan información tanto acerca de sus habilidades como de sus dificultades, enfatizando en éstas las estrategias de enfrentamiento. El niño debe ser persistente, emprendedor.
  • Motivación por aprender.
  • Aprender los conocimientos que se requieren para su desenvolvimiento en el mundo adulto.
  • Aprender a regular su conducta de acuerdo a la situación en la que se encuentra.
  • Adaptarse a normas sociales.
  • Ir, progresivamente, siendo capaz de integrar los diversos puntos de vista en sus reflexiones.

BIBLIOGRAFÍA

  • Psicóloga Alejandra Guerrero Teare 
  • http://escuela.med.puc.cl/paginas/publicaciones/manualped/desspsicesc.html
  • Erikson, E. (1963). Infancia y Sociedad, Nueva York, Norton.
  • Mussen,P.H., Conger, J.J., y Kagan, J. (1969) Desarrollo del Niño y su Personalidad. New York: Harper y Row.
  • Maier, H. (1979) Tres Teorías Sobre el Desarrollo del Niño: Erikson, Piaget y Sears. Amorrortu Editores. Buenos Aires.
  • Piaget, J. (1984) Seis Estudios de Psicología.Barral Editores S.A. España.
  • Papalia, D.E., Wendkos, S. (1993) Psicología del Desarrollo de la Infancia a la Adolescencia. Mc Graw-Hill, México.

miércoles, 14 de agosto de 2013

DESARROLLO FÍSICO-MOTOR, DE LA INTELIGENCIA, DEL LENGUAJE Y AFECTIVO-SOCIAL DE 3 A 6 AÑOS.


El niño a los 3 años aproximadamente se incorpora a la “Educación Infantil” y experimentará una serie de transformaciones importantes tanto en su desarrollo físico como mental, de la misma manera progresará en su lenguaje y en sus relaciones con los demás.
Además, la escolarización le condiciona porque le obliga a someterse a unos horarios fijos e incorporar nuevos hábitos de autonomía y adquirir destrezas que le posibiliten una iniciación satisfactoria en los aprendizajes.
Por ello expongo las características de los aspectos más relevantes del desarrollo de los niños en estas edades para que os sirvan de guía en vuestra labor diaria como educadores y padres.

EL DESARROLLO PSICOMOTOR

El niño de 3 a 4 años

  • La maduración del sistema nervioso del niño le va a permitir grandes avances en su desarrollo motor. Esto se nota en aspectos tales como:
  • Mejor coordinación de los movimientos en actividades de saltar, correr, bailar…
  • Mejor realización de movimientos para manejar objetos con los brazos y manos como lanzar y botar balones.
  • Sus habilidades manuales han avanzado consiguiendo mayor precisión en sus movimientos: pintar, garabatear…

El niño de 4 a 5 años

  • Perfecciona sus movimientos, se cae menos veces.
  • Mejora mucho su habilidad manual y puede realizar actividades escolares como: recortar, puntear y colorear con cierta precisión de movimientos.

El niño de 5 a 6 años

  • El dominio del cuerpo se consigue casi totalmente: salta, sube rampas, trepa, corre por las escaleras y se cansa muy poco porque sus movimientos son más ajustados.
  • Utiliza preferentemente la misma mano para realizar actividades: recortar, dibujar, dar cartas, pintar, etc.…
  • Aquellas actividades que exigen habilidad manual son cada vez más precisas (dibujar, puntear, recortar… ). Estos avances son imprescindibles para el inicio del aprendizaje de la escritura.

EL DESARROLLO DE LA INTELIGENCIA

El desarrollo de la inteligencia supone para el niño un largo proceso hasta conocer la realidad que le rodea y comprender lo que pasa a su alrededor.
Al nacer, el niño no distingue entre él mismo y su entorno. Está dotado de unos reflejos a partir de los cuales se alimenta, se protege, adopta determinadas posturas…
Poco a poco y en contacto con los objetos y personas, chupando, tocando, va conociendo las cosas y mediante este juego se desarrolla su conocimiento. Todo esto irá evolucionando hasta un momento en que no necesite tocarlas para conocerlas, sino que las podrá recordar (representar) aunque no estén presentes.
Podrá “pensar” que existen la pala, el balón, la mamá e imaginarse cosas sobre ellos. De todas formas, llegado este momento de desarrollo sabrá que existen la mamá, los juguetes, el gato, pero siempre hará referencia a lo que conoce: su mamá, sus juguetes, su gato…


El niño de 3 a 4 años

  • El niño, debido a los avances antes comentados, aprende a través de la imitación de situaciones reales, ve lo que hacen sus papás y hermanos en casa, lo que hace la profesora en la escuela y los imita jugando. Es a través de este juego (mamás, casitas, médicos, profesores… ) como el niño va conociendo lo que le rodea y las formas de comportamiento de los adultos.
  • A esta edad sólo entiende lo que ve y no se da cuenta de las transformaciones de una misma persona u objeto. Por ejemplo: no conoce al padre cuando se disfraza aunque le oiga hablar. Para el niño, deja de ser su padre y pasa a convertirse en “eso” en que se ha disfrazado.
  • El papel que juega el lenguaje en esta edad es fundamental porque da mayor riqueza a estos juegos, ayudando a fijar los conceptos.

El niño de 4 a 5 años

  • No es capaz de dar explicaciones sobre las cosas que pasan, de la misma forma que lo hacen las personas adultas. Lo que hace es unir cosas sin entender la causa real: “las nubes se mueven porque yo me muevo”.
  • Piensa únicamente en lo que percibe y esto, a veces, le Juega malas pasadas. Por ejemplo, si llenamos de agua un vaso y echamos la misma cantidad en una botella, dirá que hay más agua en el vaso que en la botella, porque el vaso está más lleno y la botella apenas tiene agua.

El niño de 5 a 6 años

  • Va abandonando el tipo de pensamiento que utilizaba antes y descubriendo las causas de lo que sucede a su alrededor. A esto le ayuda el hecho de estar en contacto con niños de su edad y con los adultos.
  • Se apoya mucho en el lenguaje y gracias a él busca explicaciones a las cosas.
  • Le cuesta comprender las cosas que pasan y cómo se suceden en el tiempo.

EL DESARROLLO DEL LENGUAJE

El niño de 3 a 4 años

  • Está fijando definitivamente los sonidos elementales de la lengua. Domina casi todos los sonidos, otros los va adquiriendo, pero no debe alarmamos el hecho de que algunas veces se equivoque o los altere. Por ejemplo, “abe” por “abre”, “pato” por “plato”.
  • En su manera de hablar, las frases que utiliza son más largas que antes y con términos más complicados. Aparecen artículos (el, la, unos unas) pronombres personales (yo, tú, él…), aunque puede cometer errores a la hora de usarlos. Adquiere primero aquellos que se refieren a primera y segunda persona (nosotros, vosotros…). Aparecen también adverbios y algunas preposiciones expresando situación.
  • Empieza a abandonar el estilo tan característico que tenía en las etapas anteriores (“a dormir”, “a comer”), e intenta adaptarse a una conjugación más parecida a la del adulto.
  • Entre los tres y cuatro años debe usar el lenguaje de forma que le permita entender y realizar preguntas, comprender y producir frases que expresen negación, aunque la perfección diste del modelo correcto y se conforme con poner un “no” ante aquello que rechaza: “no, sopa, no”, “no, nene, no”.

El niño de 4 a 5 años

  • La articulación del niño experimenta una notable mejoría. Van desapareciendo, aquellas incorrecciones en la pronunciación que hacía el niño en un intento de imitar palabras largas que había oído al adulto o los sonidos que se presentaban complicados.
  • Respeta el orden de las sílabas al pronunciar y no modifica los sonidos.
  • Empieza a dominar la pronunciación aunque a veces cometa errores (le cuesta pronunciar r, s , z, ch, j, l).
  • La utilización de aquellas partes de la oración que aparecieron en el año anterior y que daban nuevas posibilidades a su forma de hablar (artículos, pronombres, preposiciones y adverbios), se van consolidando y los utiliza de la misma forma que el adulto.
  • Abandona las imperfecciones que tenía entre los tres y cuatro años y podemos decir que, además de utilizar bastantes verbos, los usa en el tiempo correcto, y no comete fallos en la conjugación. Alarga las frases y expresa en alguna de ellas relaciones de causa y consecuencia: “gana porque va deprisa”, “es malo, por eso le pego”.
  • Su lenguaje le permite las mismas funciones que anteriormente (afirmar, exclamar, negar] pero con una mayor precisión. Es capaz de incluir ya la negación dentro del enunciado de la frase. Ha dejado de decir “sopa no” para decir “no quiero sopa”.
  • Su vocabulario es muy amplio y le gusta explorar el lenguaje de los demás aprendiendo palabras nuevas y tacos o palabras que, por su peculiar sonido y reacción del adulto, le hacen gracia y le resultan divertidas. Disfruta con su repertorio y quiere enriquecerlo más.

El niño de 5 a 6 años

  • En esta edad el niño tiene que pronunciar correctamente todos los sonidos de la lengua y sus errores habrán ido desapareciendo. No debemos olvidar que en el curso siguiente empieza de forma sistemática la lectura y la escritura y los errores que tenga en estos aspectos, le pueden perjudicar notablemente en dichos aprendizajes.
  • No debemos alarmarnos en el caso de que algunos niños tengan dificultades en la pronunciación de la “r”,la “s”, la “z” o “ch”; el ritmo de todos los niños no es el mismo y habrá algunos a los que cueste más pronunciar estos sonidos y necesitarán del año siguiente para conseguirlo.
  • En la utilización de artículos, pronombres, preposiciones y adverbios, así como en los verbos y su conjugación, el dominio debería ser total y no existir ningún tipo de problemas.
  • En el tipo de frases que utiliza aparecen ya construcciones que expresan tiempo: “juego un poco con mis coches antes de ir a comer”, “voy a jugar después de los dibujos”.
  • El aumento d e vocabulario se sigue produciendo, pero no de forma tan vertiginosa como en los años anteriores. No obstante, y a título orientativo, el número de palabras que el niño utiliza en esta edad se sitúa alrededor de las dos mil quinientas, que corresponden a las preocupaciones e intereses del niño.

DESARROLLO AFECTIVO-SOCIAL. HÁBITOS

El niño de 3 a 4 años

En esta etapa del desarrollo, el niño va a experimentar importantes cambios en su proceso afectivo-social así como una consolidación de sus hábitos de autonomía. Como característica común a estos tres años el niño permanece muy integrado en el entorno familiar, siendo fundamentales para él los puntos de referencia de sus padres y hermanos.

El niño de 4 a 5 años

  • El niño de esta edad generalmente está a gusto en su casa, en la familia, entre extraños o con niños de su edad.
  • Muestra grandes deseos de agradar y de colaborar, escucha con atención lo que se le dice y realiza pequeños encargos en casa, sintiendo satisfacción por sus éxitos.
  • Sin embargo, puede oponerse en muchos momentos a los deseos de los adultos, pero esto no es más que un intento de ir marcando las diferencias respecto a los demás.
  • Comienza a compartir sus juguetes con otros niños pero, aunque juegan juntos, no colaboran entre ellos.
  • Dos conductas frecuentes suelen aparecer en el niño durante este año:
    • Celos, especialmente ante el nacimiento de un nuevo hermano.
    • Miedos y temores hacia situaciones concretas y localizadas (truenos, oscuridad, etc.).

HÁBITOS DE AUTONOMÍA

El niño de 3 a 4 años


Realiza, él solo, actividades como las siguientes:
  • Come con la cuchara.
  • Puede dormir toda la noche sin mojar la cama.
  • Se lava y seca las manos solo.
  • Se interesa por vestirse y desvestirse.
  • Desabrocha botones accesibles.

El niño de 4 a 5 años

Gracias a los avances en el desarrollo de su pensamiento, el niño comienza a comprender el mundo que le rodea (conoce a los miembros de la familia, el nombre de sus compañeros de clase) y el lugar que ocupa en él (el nombre de la localidad o barrio y su dirección).
Sigue dando muestras de su incipiente “personalidad”:
    • Se siente orgulloso de sus propias creaciones
    • Llama la atención sobre lo que hace -le gusta exhibirse y se manifiesta seductor frente a los adultos.
  • Se identifica con los adultos y tiende a imitarlos, le gusta hacer las cosas de los “mayores”, por ejemplo ponerse los zapatos de mamá.
  • Es capaz de mantener por breves instantes un juego de reglas sencillas aunque al final surge la anarquía y cada cual juega a lo suyo.
  • Siente interés por las diferencias anatómicas de los sexos.

El niño de 5 a 6 años

  • La relación familiar sigue siendo muy positiva, centrada especialmente en la madre, aunque el padre adquiere cada vez mayor importancia para el niño.
  • Se muestra servicial, tiende a agradar porque es muy dependiente. Además, es capaz de mantener un diá1ogo con cualquier persona adulta.
  • Con sus hermanos pequeños adopta una actitud proteccionista, con los otros niños juega y empieza a aceptar las normas y reglas de los juegos.
  • Siente fascinación por la televisión, especialmente por los programas infantiles.

ORIENTACIONES A TENER EN CUENTA

Orientaciones para el desarrollo físico-motor

  • Tu hijo necesita muchas y variadas actividades motoras y sensoriales para alcanzar su completo desarrollo.
  • Posibilita a tu hijo amplitud y libertad de movimiento, que no se sienta atado por espacios cerrados y ropas que le agobien.
  • Necesita practicar sus nuevas adquisiciones físico-motoras (saltar, correr, deslizarse, rodar…). A veces esto entraña situaciones de riesgo para él. Es importante observarle para estar al tanto de los peligros que pueda tener.
  • Proporciónale objetos habituales para que juegue: pelotas, trapos, papeles, construcciones, revistas viejas…
  • Intenta valorar siempre los avances que consigue tu hijo.
  • Procura que el niño alterne ratos de actividad con momentos de descanso y tranquilidad, sobre todo antes de acostarse.

Orientaciones para el desarrollo intelectual

  • Juega con tu hijo. Recuerda que él no está solo jugando; está aprendiendo.
  • Mientras juega, nombra los objetos y acciones para que el niño los vaya asimilando. No te contentes con saber que tu hijo te comprende: fomenta su expresión, su lenguaje, su diálogo.
  • Observa sus juegos y actividades; a partir de ahí puedes ver cuáles son sus intereses (materiales, juguetes. ..).
  • A veces no puede comprender los razonamientos del adulto; por tanto una actitud positiva (el modo de decírselo) será más eficaz, sin que ello suponga un cambio de postura, ya que es importante que tenga pautas claras y firmes.
  • Da respuestas veraces a sus preguntas, con explicaciones claras y sencillas.

Orientaciones para el desarrollo del lenguaje

  • El que tu hijo pronuncie y articule bien los sonidos depende, en gran medida, de que vosotros, como padres, le ofrezcáis unos modelos correctos de pronunciación. En el control de la articulación interviene decisivamente el oído. Si oye bien, tendrá más posibilidades de pronunciar bien.
  • Háblale correctamente a tu hijo y no imites su forma de hablar.
  • No atosigues a tu hijo porque te parezca que va lento en algún aspecto de la pronunciación; dale tiempo porque cada niño tiene su ritmo.
  • Si a tu hijo le cuesta utilizar de forma correcta alguna parte de la oración o la construye mal, ofrécele el modelo correcto, pero tomando aquello que él ha dicho y repitiéndoselo correctamente. Por ejemplo “es su coche de su papá”. Adulto: “sí, es el coche de su papá”.

Orientaciones para el desarrollo afectivo-social. Hábitos

  • No debes presentar ante tu hijo actitudes educativas contrapuestas. (El padre deja hacer una cosa y la madre lo prohíbe).
  • Establece un número limitado de normas a cumplir, de forma clara, pero luego dichas normas se le debe exigir que las cumpla sin saltárselas “a la torera”.
  • Predica con el ejemplo: el niño aprende lo que ve.
  • No respondas a la agresividad del niño con agresividad, porque aprenderá a comportarse agresivamente.
  • Si eres demasiado rígido, tu hijo no se permitirá ningún fallo y ahogará sus deseos, lo que provocará en él una gran ansiedad.
  • Si eres demasiado permisivo no tendrá demasiada fuerza de carácter para controlarse, lo cual le hará impulsivo, débil y caprichoso.

Libro: El desarrollo psicológico del niño de 3 a 6 años (2011)
GOBIERNO DE NAVARRA. Departamento de Educación.

domingo, 11 de agosto de 2013

DESARROLLO PSICOMOTOR, INTELECTUAL, DEL LENGUAJE Y AFECTIVO SOCIAL 0-3 AÑOS

Este período de 0 a 3 años es fundamental para el desarrollo del niño como persona integrante de una sociedad en un futuro, con unos valores, normas y actitudes que hay que respetar y con los que hay que convivir.


El niño va a experimentar grandes cambios y progresos en todos los ámbitos del desarrollo: motor, intelectual, del lenguaje y afectivo social. 

  • Cada niño tiene su propio ritmo de crecimiento y desarrollo.
  • Tanto el ambiente familiar como el educativo van a determinar su desarrollo. 
Conocer cada etapa, saber de sus posibilidades y de sus necesidades, es imprescindible a la hora de establecer unos objetivos, unas unidades didácticas, una programación. 
A continuación despliego una serie fases generalizadas por las que pasará el niño en su desarrollo según los 4 ámbitos citados anteriormente.

1. EL DESARROLLO PSICOMOTOR

1.1. EL NIÑO DE 0 A 1 AÑO 
  • Al nacer un niño mide 50 cm. y pesa 3,5 Kg. y ahí comienza un desarrollo regular y continuo (curva de desarrollo). 
  • Las cuatro primeras semanas son el periodo neonatal, transición de la vida intrauterina a una existencia independiente. 
  • El bebé al nacer tiene características distintivas: cabeza grande, ojos grandes adormilados, nariz pequeña, mentón hendido (mamar) y mejillas gordas.
  • La cabeza del neonato es ¼ de la longitud del cuerpo, los huesos del cráneo no estarán completamente unidos hasta los 18 meses.
  • El crecimiento físico es más rápido durante los 3 primeros años que durante el resto de la vida.
  • El primer diente aparece entre los 5 y los 9 meses, al año tienen entre 6 y 8 y a los 2 años ½ tienen 20.
  • La habilidad de moverse deliberada y acertadamente es progresiva, hay un orden definido para la adquisición de destrezas motrices. 
  • La habilidad para caminar y la precisión de agarrar son dos de las habilidades motrices más distintivas de los humanos, ninguna de las cuales están presentes en el momento de nacer.
  • Leyes del desarrollo: o Ley céfalo−caudal: primero se controlan las partes más cercanas a la cabeza, de arriba hacia abajo (brazos antes que piernas) o Ley próximo distal: primero se controlan las partes más cercanas al eje corporal (brazo, muñeca, mano).
  • Progreso del control postural (según estas leyes).
    • 3 meses − control de la cabeza.
    • 3 meses − comienza a rodar sobre si mismo.
    • 3 ½ meses agarrar un objeto un muy grande.
    • 4 meses − coordinación óculo−manual o No sacudida de brazos ni manotazos.
    • 6 meses − sentado sin ayuda.
    • 7 meses − pinza digital fina.
    • 8 meses − gateo y arrastre.
    • 10 meses − puesta en pie, desplazamientos agarrado.
    • 12−14 meses − empezar a caminar sin ayuda.

1.2. EL NIÑO DE 1 a 2 AÑOS 
  • Descubrimiento de la escalera, primero con ayuda, poco a poco solo.
  • 14 meses construir una torre de dos cubos.
  • Andar empujando correpasillos.
  • Jugar a tirar y recoger la pelota, con las manos y los pies.
  • Garabatear, encajables, tirar y recoger.
  • Incansable para el juego y la repetición.
  • Empezar a comer solo.
  • 2 años agarrar una taza por el asa y beber solo.

1.3. EL NIÑO DE 2 a 3 AÑOS 
  • Pedalear en triciclo 
  • Subir escaleras alternado los pies, el bajar en segundo lugar 
  • Quitar y ponerse ropa (sencilla, sin botones ni cremalleras) 
  • Comer solo sin apenas manchar 
  • Pintar, garabatear, rayas y circulo 
  • Control de esfínteres (primero de día, una vez conseguido de noche) 

2. EL DESARROLLO INTELECTUAL


En el momento del nacimiento hay unos reflejos innatos: succionar y agarrar. A partir de ellos se empieza a aprender, son respuestas ante un estímulo.

  • Preferencias innatas: objetos brillantes, contrastes, movimientos, colores y sonidos. Al ir creciendo los estímulos atractivos son cada vez más complejos, sigue mirando lo brillante y los contrastes, los movimientos (boca, ojos, cabeza,), sienten agrado por el contacto físico y el olor de sus seres cercanos.
  • A través de los estímulos se va desarrollando el conocimiento.
  • A través de los sentidos y los movimientos mantiene la relación con el mundo. Así se va dando cuenta de las consecuencias de sus acciones.
  • Va desarrollando la intencionalidad de los actos y la coordinación de los esquemas mentales. 
  • Al realizar movimientos con las manos se establecen conexiones en el cerebro, es el primer paso, el segundo es establecer una relación con el medio.
  • La percepción de profundidad es innata o aprendida muy temprano, pero no implica un temor a las alturas.
  • El sentido del peligro se desarrolla más tarde y está relacionado con la habilidad para moverse por sí solos.
  • Los niños primero aprenden a copiar, después a improvisar y más tarde a crear.


3. DESARROLLO DEL LENGUAJE

3.1. EL NIÑO DE 0 a 1 AÑO
  • La primera actividad vocal del bebé es llorar.
  • 1º mes − balbuceo 
  • 6 meses − atento a los sonidos intentar reproducirlos. Sonidos casuales (ajo).
  • 9 meses− vocales(a / e) 
  • 1 año − primeras palabras. 5 vocales y algunas consonantes (p / t / m).
  • La afectividad es el motor del desarrollo del leguaje. Es imprescindible establecer vínculos afectivos con los adultos del entorno.
  • El manejo del habla no es únicamente una cuestión de aprendizaje, es también una función de maduración.

3.2. EL NIÑO DE 1 a 2 AÑOS 
  • 12 meses − frases de una sola palabra "agua".
  • 15 meses − unas diez palabras.
  • 18 meses − frases de dos palabras mamá zapato.
  • 2 años − jerga (hablar mucho), entonación, ritmo y pausas adecuadas. Buena pronunciación de todas las vocales, la mayoría de las consonantes y algunos diptongos. 
  • Repetición de algunas expresiones, al principio en el mismo contexto, posteriormente en otros (todas las mujeres son mamá, ya está, para dejar todo).

3.3. EL NIÑO DE 2 a 3 AÑOS 
  • Poco a poco va hablando más y mejor.
  • De 2 a 3 se duplica el vocabulario. 
  • Utilización del plural, el género, los artículos, los demostrativos, posesivos y pronombres personales. Formas verbales: infinitivo y presente.
  • 2 años ½ frases completas, su lenguaje es comprensible por los adultos en general. 
  • Gusto por hablar, expresión intencionada, habla con las personas de su entorno y con los juguetes. 
  • 3 años habla muy bien, puede haber algunos problemas de pronunciación pero es normal hasta los 5 años.

4. DESARROLLO AFECTIVO− SOCIAL 

4.1. El niño de o a 1 año
La afectividad es un aspecto crucial en el desarrollo social, primordial durante los dos primeros años. Desde el nacimiento el niño busca los estímulos sociales, expresa sus intereses, sus deseos y disgustos.
  • Durante los primeros meses se desarrolla el vínculo de apego a la figura de referencia (alimento, cubrir necesidades y seguridad).
  • 2 y 3 meses, aparición de la sonrisa (indiscriminada y espontánea), comienza a distinguir partesen la cara (ojos, boca − lo que se mueve).
  • 4 meses − capaz de expresar tristeza, alegría, sorpresa y enfado, cuando no reconoce, reacciona con cautela, sonrisa intencionada, muestra de agrado.
  • 8 meses − miedo a los extraños, no a otros niños (aún siendo extraños).
  • 1 año − capaz de regular el comportamiento según las expresiones emocionales de otras personas. Expresa vergüenza y timidez.
  • Inicia el desarrollo de procesos mentales, afectivos y conductuales de socialización.

4.2. El niño de 1 a 2 años 
  • Comienza a reconocer la expresión de sus sentimientos y emociones en entornos familiares.
  • Comienza a tener recuerdos.
  • En el proceso mental de socialización, se reconoce a si mismo y a otras personas.
  • En la adquisición de conductas, reconoce y aprende normas, costumbres y valores. Controla mejor su comportamiento.
  • En el proceso afectivo, se consolidan los vínculos con su entorno. Valora en las relaciones con los demás la cantidad, calidad, proximidad, exclusividad, accesibilidad, incondicionalidad y permanencia (especialmente con la madre).
  • Gracias a la capacidad mental y el desarrollo del lenguaje, la interacción con el entorno cercano está cargado de significado social.

4.3. El niño de 2 a 3 años 
  • Controla las interrelaciones en su entorno. 
  • Conoce cada vez mejor su identidad y su rol, desarrollo de la autoconciencia.
  • Empieza a controlar su comportamiento, conoce los valores, las normas, costumbres, conductas deseables, indeseables y las habilidades sociales.
  • Aún hay están en desarrollo algunos aspectos de la norma social, por lo que se enfada con frecuencia y tiene rabietas. 
  • En ocasiones sus deseos y lo que los demás le exigen están en conflicto y no lo comprende.
  • La familia y el grupo social son fundamentales para que aprenda los valores y las normas.
  • Cuando se dan cuenta de que nadie puede conocer sus pensamientos, desarrollan la habilidad de mentir.

TEST DE DESARROLLO MEDIO−RÁPIDO 


DE 0 A 3 AÑOS 
  • 3 meses 
    • Sigue con la vista objetos muy pequeños.
    • Atiende a sonidos no estridentes (voz normal).
    • Balbucea.
    • Dirige la mano hacia el objeto. 
    • Se incorpora sobre si mismo sobre antebrazos.
    • Sonríe ante cualquier persona.
    • Ríe fuertemente (da gritos de alegría).
    • Juega con los objetos que le son familiares.
    • Sujeta y es capaz de soltar un objeto.
    • Juega con sus manos, las mira.
  • 6 meses 
    • Busca juguetes fuera de su alcance visual.
    • Conoce las voces más familiares.
    • Aprecia sonidos significativos.
    • Comienza a desarrollar la pinza digital.
    • Sentado erecto con soltura.
    • Avanza algo gateando.
    • Sílabas bien definidas (da, ba, ca).
    • Habla con su imagen en el espejo.
    • Trata de tocar su imagen en un espejo.
  • 9 meses 
    • Consigue ponerse en pie.
    • Intenta dar algún paso el solo.
    • Pinza digital fina.
    • Imita sonidos con perfección.
    • Dice papá, mamá.
    • Puede jugar, sentado, con varios objetos.
    • Palmadas, gestos de adiós.
  • 12 meses − 1 año 
    • Camina solo, o llevado de la mano.
    • Sube gateando una escalera.
    • Cinco − diez palabras.
    • Cumple órdenes más complejas (lleva esto allí).
    • Hace garabatos espontáneamente, o después de una demostración.
    • Intenta hacer torres.
    • Se agacha y se levanta sin caerse.
    • Sólo tres − cinco palabras con significado.
    • Sólo cumple órdenes simples (dámelo).
  • 18 meses − 1 año ½ 
    • Sube escaleras sin ayuda ninguna o apoyándose.
    • Es capaz de desplazar un objeto repetidamente con el pie.
    • Arroja objetos con cierta precisión a corta distancia.
    • Vocabulario de hasta 10 − 20 palabras simples.
    • Puede imitar palotes.
    • Transporta un vaso (mediado) sin derramar.
    • Bebe en baso sin derramar.
  • 24 meses − 2 años 
    • Sube y baja escaleras, corre bien.
    • Salta varias veces seguidas sin caerse.
    • Salta con los dos pies junto, sin ayuda.
    • Captura un balón dos de cada cinco veces.
    • Señala y conoce todas las partes externas de su cuerpo.
    • Distingue sus miembros dobles (una mano, y la otra).
    • Imita circunferencias (redondos).
    • Imita un trazo vertical y uno horizontal.
    • Frases de tres y más palabras con algún verbo.
  • 28 meses − 2 años ½ 
    • Intenta sostenerse sobre un pie, a veces brevemente lo consigue .
    • Abre y cierra tapes a rosca.
    • Utiliza pronombre y tiempos verbales, pasado y presente con corrección.
    • Conoce y define los objetos por su uso.
    • Comienza a manipular preferentemente con una mano.
    • Sabe ponerse las zapatillas.
    • Ayuda a vestirse.
  • 36 meses − 3 años 
    • Sube y baja escaleras como un adulto, alterna los pies.
    • Es capaz de montar en bicicleta.
    • Equilibrio sobre un pie más prolongado.
    • Es capaz de copiar un círculo y una cruz.
    • Hace oposición entre opuestos (alto − bajo, arriba − abajo,).
    • Cumple dos o tres órdenes simultáneas
    • Vierte agua de un vaso a otro sin derramar.
    • Repite ordenadamente uno, dos y tres.
    • Monta en triciclo usando los pedales.
    • Tiene concepto claro de uno y dos.
    • Vierte agua de un vaso a otro derramando un poco.